Gillette Espuma de Afeitar en Gel / 200 ml

1. Lava tu rostro con agua tibia:

- Antes de aplicar la espuma, lava tu cara con agua tibia para abrir los poros y suavizar el vello facial. Esto prepara la piel y hace que el afeitado sea más fácil y cómodo.

2. Seca tu rostro ligeramente:
- Si tienes mucha agua en el rostro, sécalo con una toalla, dejando la piel ligeramente húmeda, ya que esto ayuda a que la espuma se adhiera mejor.

3. Agita bien la lata de espuma:
- Agita el envase de la espuma de afeitar para asegurarte de que salga bien mezclada y con la consistencia adecuada.

4. Aplica la espuma:
- Coloca una cantidad adecuada de espuma en la palma de tu mano. No necesitas una cantidad excesiva; lo suficiente para cubrir el área que vas a afeitar es suficiente.

5. Distribuye la espuma en tu rostro:
- Usa tus manos para aplicar la espuma en las áreas donde te vas a afeitar (generalmente en el rostro y el cuello). Asegúrate de cubrir uniformemente toda la zona con una capa suficiente de espuma para proteger la piel.

6. Afeítate:
- Con una navaja de afeitar limpia y afilada, afeita en la dirección del crecimiento del vello para evitar la irritación. Si es necesario, puedes hacer pasadas suaves en contra de la dirección del vello para un apurado más cercano, pero con cuidado para evitar cortes.

7. Reaplica si es necesario:
- Si en alguna área la espuma se ha disipado mientras te afeitas, reaplica una pequeña cantidad para mantener la protección de la piel.

8. Enjuaga tu rostro:
- Después de afeitarte, enjuaga tu cara con agua fría para cerrar los poros y eliminar cualquier residuo de espuma o vello.

9. Sigue con un after shave (opcional):
- Si lo prefieres, puedes aplicar un after shave para calmar y hidratar la piel después del afeitado.

Consejos adicionales:
- Asegúrate de que la cuchilla esté afilada para evitar tirones en el vello y cortes.
- Si tienes la piel sensible, elige una espuma de afeitar diseñada para ese tipo de piel, o prueba con geles que suelen ser más suaves.